JEREZ-KOSOVO Y SUS “SEPULCROS BLANQUEADOS”:

El verano xericiense nos ha traído múltiples noticias a través de las cuales se deduce que nuestras autoridades municipales están agobiándose con el estado de nuestro Patrimonio.

Tras la formación de la multitudinaria, pero incompleta, Mesa del Patrimonio en Julio,  vinieron otras  Jornadas Patrimoniales  y la Presentación de las Jornadas Conmemorativas del 750 Aniversario de la Reconquista. En consecuencia,  tras estos variados actos, tuvo que venir, forzosamente, la reflexión acerca de lo que se quería y podía mostrar a quienes acudiesen a nuestra ciudad para presenciar dichos fastos y participar en tanta Pompa y Ceremonia, como se estaba  publicando. 

Plaza del Barranco ¿Le dará un "blanqueado" el Ayuntamiento?

Lo que se podía mostrar eran las vergüenzas de una ciudad cuyo casco y barrios extramuros históricos están llenos de derribos y casas basurero, como recién salidos de alguna tremenda batalla: la del Abandono de sus ciudadanos; la del Despilfarro de sus Ayuntamientos que gastaron en proyectos absurdos en lugar de invertir en sus tesoros del pasado;  la de la Ignorancia de todos los jerezanos, gobernantes y gobernados, que miramos hacia otro lado, hacia urbanizaciones y barriadas, encogiéndonos de hombros. 

Y la del Mal Gusto, tremenda muestra de incultura, de la que se ha hecho gala desde el franquismo, pasando por el pachequismo y que aún aletea actualmente,  porque esa lacra no tiene color político ni entiende de clases sociales, sino que es Eterna, como la Ira de Dios, manifiesta en las “horrendidades” pasticheras y pseudo-modernas, por igual, que vemos ubicadas en los lugares mas inadecuados.

Como en los Cuentos de Hadas, el Municipio se volvió bueno y reflexionó acerca de sus errores, oxigenando casi todos los días vacacionales con noticias de inminentes restauraciones y proyectos de rehabilitación que, como la Segunda Venida de Cristo o “Etimasía” ortodoxa no se sabe cuando ocurrirán  ni cómo serán, dando, en consecuencia, mucho miedo.

Rehabilitación de los Claustros de San Agustín, obras en las antiguas Bodegas de Parra y su tabanco anexo conocido como  “El Duque”, proyecto para urbanizar la Plaza Belén y runrunes de un proyecto privado para la calle Cordobeses. Y extramuros, un bar en “La Rosaleda”, destruida, como el resto del Parque González Hontoria y sus casetas, por el “Innombrable”. Si se hace bien, estará bien hecho, pero ¿Quién supervisará estas intervenciones? ¿Quien le podrá el cascabel al gato?

Y hay más. La idea de que los turistas fuesen  capaces de llegar de la Colegial-Catedral hasta San Mateo sin perderse, les ha dado la idea de señalizar el suelo de las calles para que no se roben las señales  metálicas, hasta aquí, vamos bien. Pero el recorrido, todos los recorridos posibles, están como ya sabemos quienes hacemos las rutas o quienes se han interesado por estas calles: hechas una lástima. Así pues, se van a blanquear las fachadas para "adecentar el recorrido". Estupendo, porque dentro de un año, la cal se habrá caído y el dinero, nuestro dinero, se habrá tirado, una vez más, por el retrete.

Vista de la Plaza del Barranco desde las dependencias municipales de Cultura, en la Plaza Peones

Se habrán "blanqueado los sepulcros”, tan hipócritamente como los del Evangelio,   que actualmente conforman esas calles, se habrán maquillado las casas vacías, en ruinas o llenas de basuras y okupas, los nidos de miseria que son estos edificios antiguos que se abandonaron hace tiempo. Y, una vez más, los políticos actuaran como tales: disimulando la realidad de cara a la galería.

Nos negamos al maquillaje, necesitamos cirugía pero no estética, de las arrugas de expresión y las marcas de la edad, como las famosas que no envejecen nunca. 

Queremos una cirugía profunda para nuestra ciudad: La aplicación del completísimo Plan Integral existente desde hace años y del cual el presentado en Julio es una síntesis.

Es indispensable que exista un Delegado dedicado en exclusiva  al Casco Histórico que se responsabilice de lo que en él hay y de sus necesidades urgentes. Una concienciación política y ciudadana y el compromiso de ambas partes para solucionar los problemas de fondo, sociales, económicos y patrimoniales que conocemos. Una rehabilitación integral e integrada de estas maltrechas zonas, ayudando a los propietarios con el compromiso y apoyo de la Administración.

Los blanqueos no sirven de nada si las casas del centro se están cayendo a pedazos, como se puede ver desde las dependencias de Cultura en la derribada y mal rehecha  Plaza Peones, con vistas a las ruinas de la esplendida edificación del XVII que aún tiene la pancarta que puso allí Pacheco. Una vez más, se pretende empezar la casa por el tejado.

Vista desde las dependencias de Cultura  de la casa de la Plaza del Barranco.

Es imprescindible empezar dando ejemplo, evitando que ocurra como en el derribo de la calle Santa Rosa esquina con Zaragoza, donde se han metido las excavadoras sin hacer la mas mínima cata arqueológica, sin tener en cuenta que está situada en el entorno de la Puerta de Sevilla y del convento de Santo Domingo y que allí podrían encontrarse restos de interés. Pero la desaparición del equipo de arqueólogos municipales y el descuido de la Delegación de Cultura de Cádiz, conlleva estas barbaridades. ¿Cómo podremos creernos lo que digáis, señores ediles?

Es la lucha de este blog y de sus seguidores, pero es también la de muchos ciudadanos, cada vez más, que deseamos recuperar nuestros barrios históricos, que deseamos que nuestra ciudad sea como tantas otras que visitamos cuando vamos de viaje, esas donde pasear es un placer y donde vamos mirando lo que nos rodea, no el suelo, lleno de mojones de perros y orines humanos, casas llenas de basura que alternan con derribos también convertidos en muladares. 

Queremos una ciudad donde se  respete nuestra historia y su legado material e inmaterial, sabemos que nuestro pasado es una esplendida opción de futuro.

Esperanza de los Ríos.